Siempre soñamos con un vestido de novia perfecto, que nos siente bien, que sea bonito, cómodo y un largo etc, porque sí, somos muy exigentes con nosotras mismas, demasiado.
Hoy os vengo a dar unos tips, según tu forma del cuerpo que os puede quedar mejor o que es aconsejable para que os veías bien y preciosas. Esto no quiere decir que si ves un vestido que te encante tengas que descartarlo por lo que te puedan decir, la decisión y quien tiene que sentirse guapa eres tu.
Si tienes un cuerpo triangular o de pera se tiende a tener cierta desproporción entre la parte superior que es más estrecha que la parte inferior que se ensancha. La solución más acertada es ampliar ligeramente la zona de los hombros y dejar suave holgura en el cuerpo. Escoge un corset y es preferible que termine justo en la cintura. los escotes en la espalda y las mangas japonesas no suelen ser la mejor opción.
Si tu cuerpo es más como un reloj de arena es más equilibrado y admite todo topo de diseños, colores, dibujos, estructuras y tejidos. si eres de este tipo de cuerpo aprovecha... que suerte que tienen algunas jejej. Si se suele ver más como se potencia la cadera.
Ahora... si tu cuerpo es mas ovalado le favorecen las líneas rectas y básicamente sin adornos salvo en la zona superior, aunque las telas deben colgar de los hombros, poco gruesa no tener rugosidades. el corte princesa o el de dos piezas son tus aliados. la parte inferior mejora con faldas cruzadas o paños.
Todavía no he dicho el tuyo? ya voy ya voy :)
Tu cuerpo es más rectangular, es decir los hombros y la cadera están equilibrados. El corte princesa, con pinzas y detalles en la parte superior, es lo más apropiado.
Por último está el cuerpo de triangulo invertido, en este caso debemos potenciar todos los detalles en la parte inferior del vestido. Favorecen las líneas rectas, plisadas o a paños, evitando fruncen en la cintura, así como volantes o capas. Lo mejor y el mejor aliado son las telas de seda y satenes.
Espero que os haya servido algo de ayuda o simplemente como curiosidad, ya que a veces el vestido no nos convence del todo y no sabemos cual es la razón. Entender nuestro cuerpo hace que tomemos mejores elecciones.
Miel de Luna
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